miércoles, 22 de abril de 2009

Elefantes, gente imbecil y las manos abiertas

Es tarde en la noche, pero siempre hay algo que escribir, esta vorágine incontrolable llamada corazón me ha tenido con insomnio, vómitos, problemas estomacales, etc. Inicialmente esta nota se llamaría Camas Ajenas, y es un tema que tratare uno de estos días, después de este momento perfectamente pondría al elefante con la trompa arriba para que llegue la anhelada suerte.

 

Tengo ganas de cagarme en harta gente, sobre todo en la soberbia, en el poco profesionalismo, en la flojera, en el pensar que uno tiene la vida comprada y que a pesar de ser una persona limitada, cree tener su puesto asegurado. Ay del día en que enfrentes un proyecto solo, y que no tengas minutos ni Internet, por que ese será el día en que sepas que solo no eres capaz de nada, mas que hacer lo que ya te enseñe…

 

Manos abiertas, deseando que la vida de otro giro, pero que esta vez sea para siempre, no aguantare mucho con este dolor ni tampoco otra ilusión desvanecida en el aire, son días de lagrimas, de dolor y soledad, nada borrara lo hecho, nada hará volver el tiempo atrás, los errores no se desvanecen, se corrigen, y la delicadeza al encauzar tu vida es indispensable mas si no quieres que un ligero desvío mande todo al carajo de nuevo…

 

No quiero temer, quiero ser valiente

No quiero sentir rencor, quiero amar de verdad

No quiero desconfiar, quiero sentir que me amas aun estando en China

No quiero ser inestable, quiero empezar a decir las cosas sin rabia ni dolor y en el momento adecuado

No quiero que muera esta flor, _________________________________

No quiero que sea una ilusión, _________________________________

 

Quiero… otro día quiero

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